La cantante sale de un problema para meterse en otro. En esta ocasión, según ha contado su padre Mitch Winehouse en su programa online, Amy ha sufrido dificultades tras su operación de senos, realizada recientemente, y ha tenido que ser hospitalizada.
El arreglo le podría llegar a costar casi 40.000 euros, pero existen otras fuentes que han declarado que se trata de un resfriado.
Corroborando la versión de Mitch, un amigo de la cantante británica ha explicado en el diario ´Daily Mirror´ que "ella vio algo que se salía de su top. Ver cosas escurriéndose fue horrible". Pero las dificultades con la cirugía no le han minado a Amy sus ganas de pasar por el quirófano, ya que una fuente ha afirmado que "va a operarse para parecer una pin-up", uno de sus sueños.
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